Crumble de frutas sin gluten

Los dulces y postres, los tengo muy restringidos. Me limito a comer fruta, alguna fruta seca, o alguna cosa elaborada con agar agar y los fines de semana, cocino algo para mi pareja, que sea apto para mi también, y como un poco. De esa forma no abuso. Pero este postre lo hago alguna vez cuando el cuerpo me pide un dulce rico y sano, y como es tan fácil de preparar, me lo preparo en un momento. Además como lleva fruta, casi no tengo que ponerle ningún endulzante, y no lleva ni levaduras ni gasificantes, así que no me hace ningún daño. 

Esta vez he preparado una galleta, pero a veces hago la mezcla de harina, con fruto seco, margarina apta y lo pongo por encima de la fruta salteada, y al horno! 

Y aquí os dejo el otro crumble anterior, el normal para quien si pueda tomar gluten.

Lo preparo con harina de arroz integral, a mi me gusta mucho el sabor y el crujiente. Las frutas, pues manzana casi siempre porque es la que mejor me va, pero cualquier fruta de temporada, le va genial. Y las frutas rojas le van al crumble de miedo!! Eso sí, yo las fresas las tengo que consumir siempre ecológicas, pues las normales llevan mucha química, para que crezcan hermosas y bonitas, y a mi eso me daña mucho. Así que cuando empiecen a venir bien y las pueda comprar ecológicas me lo haré con fresitas y cerezas ecologícas.

Ingredientes


Para la galleta

• 120 gramos de harina de arroz integral
• 50 gramos de almendra molida
• 80 gramos de margarina (en mi caso de AOVE y girasol de primera presión)
• 50 gramos de compota de pera (o 1 huevo)
• stevia, o xilitol al gusto (yo le pongo muy poco pues la fruta es dulce)
• canela al gusto, una pizca de nuez moscada

Para la fruta

• 4 manzanas grandes peladas y cortadas en cuartos y fileteadas
• 4 ciruelas peladas y cortadas
• 100 gramos de frambuesas congeladas
• esencia natural de vainilla 
• canela
• stevia al gusto, o concentrado de manzana al gusto
• 50 gramos de avellanas
• 50 gramos de mantequilla 

Elaboración

Mezclamos los ingredientes de la galleta.  Ponemos papel de horno en un molde y estiramos la masa sobre el papel, estirándolo bien para que quede bien fina. Horneamos a 180º, hasta que quede dorada.

Ponemos a enfriar, para que quede un poco crujiente. Colocamos en una picadora, junto a las avellanas y la mantequilla. Trituramos para que quede una masa arenosa.  Reservamos.

Preparamos la fruta y salteamos en una sartén con un poco de mantequilla. Añadimos la vainilla, la canela y el endulzante al gusto.

Colocamos la fruta en un molde o moldes resistentes al horno. Cubrimos con la mezcla arenosa. Y doramos en el horno a 180º hasta que esté dorado.

Degustamos cuando esté templado o frío, como más os guste.