Seguramente la mayoría de nosotros, como yo misma comemos los buñuelos de bacalao congelados, preparados o fuera de casa... Pero es una receta fácil, sin demasiada complicación y aún más buena si los preparamos nosotros mismos. Creo que es la segunda vez que la preparo, y el sábado pasado cuando pensaba en el menú de cumpleaños de mi madre...no sé porqué me vino de pronto el antojo de buñuelos y de prepararlos en casa. Así que compré bacalao y busqué una receta para preparar la masa en casa. Se prepara en un momento y hacer los buñuelos, es tan fácil como hacer montoncitos con una cucharay freirlos en el aceite bien caliente...no tiene más complicación que esa..
Si se los damos a los niños, no estamos más tranquilos sabiendo los ingredientes que llevan?? no es que sea una receta para diario, porque los fritos no son muy recomendables...pero de vez en cuando está bien, y mejos si son elaborados en casa. Para acompañar y rebajar las grasas, una buena ensalada de acompañamiento.
Los encontramos deliciosos y fue todo un éxito..Sin más os dejo con la receta y con unas fotos para que veais la presencia con la que quedan estos buñuelos de bacalao caseros.
Ingredientes
- 150 gr. bacalao desalao (yo usé congelado desalado al punto de sal)
- 1-2 dientes de ajo (yo uno)
- 1 cebolleta (yo media)
- 1 buen ramillete de perejil
- 1 huevo
- pizca de sal
- azafrán o cúrcuma
- 100 cc de agua
- 1/4 cucharadita de bicarbonato o levadura royal o gasificante
- 110 gr. de harina
- aceite abundante para freir
Elaboración
Si utilizamos bacalao seco, ponemos en remojo el bacalao la tarde de antes en un colador y en un bol grande. De esta forma podemos cambiar un par o tres veces el agua. Lo dejamos toda la noche. Le quitamos el agua por la mañana, quitamos la piel y desmenuzamos el bacalao con cuidado de eliminar bien las espinas.
Mezclamos en un cuenco el bacalao desmigado, con el huevo, la harina, el agua, el bicarbonato y una pizca de sal y el colorante amarillo. Removemos bien, añadimos la cebolleta picada, el perejil y ajo todo muy fino. Removemos con el tenedor hasta que la masa quede liso y espesa, como una especia de gachas.
Calentamos abundante aceite, y cuando esté bien caliente. Vamos añadiendo cucharadas de masa. Cuando hayamos puesto la masa, le damos un poquito de forma redondeada, añadimos otras pocas, y dejamos que se doren. Ponemos en papel absorbente.