Sueño Oriental

Este sueño de oriente no me conquistó las primeras veces que miré el libro  Agar agar, el secreto para adelgazar de los japoneses. Ya sabéis que el agar agar es una gelatina, que proviene de un alga o de un tipo de algas.  Es la gelatina que usan veganos y vegetarianos y más gente que está aprendiendo las propiedades buenas del agar agar, y cuando yo empecé a usarlo como gelatina única, es cierto que me costaba un poco saber cantidades, usos y demás, así que me animé con este libro, que además conseguía más variedad de recetas y uso. 

Es un flan sin huevo, con leche vegetal, es dulce y sabroso, así que invita a soñar  "sueño", y "oriental", porque la almendra y el agua de azahar, le da el toque oriental y un sabor, que hace de este postre una receta especial y para días de fiesta. 

Ingredientes

• 80 g. de puré de almendras blancas (hecha en casa, triturar hasta que la almendra estraiga su aceite y haga un puré o crema, sino añadir un poquito de aceite de sésamo o nuez)
• 5 cucharadas soperas de jarabe de agave (yo usé sirope de arroz)
• 200 ml. de leche de arroz
• 2 g, de agar agar
• 1 cuchara 1/2 de agua de azahar

Elaboración

Mezclamos en un bol el puré de almendras con tres cucharas soperas de sirope de ágave o sirope de arroz, o concentrado de manzana o miel, al gusto o necesidad de cada cual.

En una cacerola, mezclamos la leche, 200 ml. de agua y el agar-agar. Ponemos a hervir y dejamos que cueza. Tras la ebullición dejamos 30 segundos.

Añadimos progresivamente la mezcla del puré de almendras, disolviendo bien.

Vertemos en 4 moles de flanes o vasos y dejamos enfriar. Aproximadamente 1 hora. Luego metemos si nos gusta tomarlo fresquito.

Servimos  y tomamos con un poco del jugo de mezclar el sirope con el agua de azahar,

Nota- los siropes de cereales como el arroz o la cebada, contienen esencialmente glúcidos de digestión lenta, al contrario que el azúcar. Estos cereales son ideales para el organismo y permiten endulzar los postres, sin engordar.

Tartar o ensalada ácida de algas

Las algas no han sido un nuevo descubrimiento, pero si es cierto que desde hace 1 año y medio, están más presentes en mi alimentación. Yo solía tomar nori, agar agar y algo de wakame. Pero ahora deberían incluirse todos los días en mi dieta. A parte de tener muchos aportes interesante, son muy buenas para el buen funcionamiento del intestino. 

Las que tengo en uso en casa son el wakame, nori, kombu. Su uso habitual suele ser la nori para hacer sushi o también para salar, tostar y poner en ensalada. La wakame en ensaladas de este tipo es lo que más me gusta, a veces se le puede añadir arroz, o taro cocido para hacer más completo el plato. Y la kombu es ideal para la buena cocción de legumbres, de arroz, o para una sopa... Utilizo un trozo, la troceo en cuadros pekeños con la tijera y se agrega en la cocción.

Esta ensalada me la sugirió Palmira, pero yo tenía la receta en mi libro de Algas, así que la probé y me encantó, me resultó más fácil comer algas, ya que en la ensalada verde no me acaba de gustar esta textura tan resbaladiza, el nori lo llevo mejor. 

Con el punto de acidez y crujiente, le da un sabor muy bueno a este tartar o ensalada de algas. 

El wakame tiene proteínas, vitaminas A, B1, B22, niacina, B6,B9, C y calcio. Así que animaros a usarla. Ayer encontré copos que yo suelo usar tiras, y vamos a ver que utilidad le sacamos, quizás para volver a hacer los blinis de alga wakame o quien sabe, habrá que rebuscar...

Tiene una forma larga y fina de 1 a 3 m. de largo y de 20 a 50 cm. de ancho. Es recortada por sus bordes y presenta un nervio central. Es un alga asiática aunque se ha introducido en las costa Bretonas. Se puede presentar en tiras largas, en tiras más adecuadas para comer, por su tamaño y en copos. 

Si se utiliza en frio, sin cocinar, debemos poner a remojo en agua durante unos 20 minutos, para que ablande. 

Su sabor es de ostra, aunque yo esto no lo puedo constatar, pues no las he comido nunca. Su consistencia como os he dicho anteriormente es untuosa y tiene un nervioso carnoso y crujiente. 

Como el kombu, acelera la coccción de las legumbres y cereales, pero su delicioso sabor y su precio más elevado que el resto de las algas, invitan a realizar muchas preparaciones como ingrediente principal. Aporta un sabor marino y untuosidad a las sopas. Esta información la he extraido del libro Algas  Sabores Marinos para cocinar de la editorial Hispano Europea. 

Ingredientes

• 1 limón (mejor ecológico)
• 3 cucharadas soperas de copos de mezcla de algas dulce, lechuga de mar y nori (yo usé wakame)
• 1 cucharada sopera de agua
• 2 chaloras (yo usé cebolleta porque no tenía chalotas)
• 1 cucharada sopera de aceite de oliva

Elaboración

Es un tártaro fácil de preparar. Se puede servir en la cáscara de limón, como suegerencia y se puede acompañar de tostaditos en los aperitivos, blinis e incluso patata o taro cocido.
Una cucharada de este tártaro en una vinagreta dará una nota fresca y ácida muy agradable a ensaladas y crudités.

Cortamos el limón en dos. Exprimimos una mitad y reservamos la piel para presentar el tártaro si queremos presentarlo así. Pelamos la piel de la otra mitad y reservamos la pulpa para otro plato.

Vertemos el zumo en el vaso de la batidora, junto con la piel y el resto de ingredientes, y batimos durante 1 o  minutos.

En mi caso lo pique todo a mano  haciendo cuadritos no muy grandes y le puse el zumo de límón y aceite. El alga hay que ponerla a remojo unos 20 minutos antes en agua. Ya que yo no hice el tartar esta vez, sino una ensalada

Colocamos el tártaro en la media piel de limón y reservamos en frio al menos media hora antes de servir.

Receta extraida de : Algas  Sabores Marinos para cocinar de la editorial Hispano Europea

Calippo de frutas rojas sin azúcar

Tengo varias recetas pendientes, algunas de ellas muy interesantes para mi. Cosas ricas y sanas, También tengo una entrada larga pendiente, que publicaré un poco más adelante, porque es muy intesante y seguro que os gustará. 

Pero estas recetas fáciles, sencillas y fresquitas, no me puedo resistir a compartirlas y dar nuevas ideas, sin demora. Y es que con el calor que tenemos, estas cosas apetecen mucho.

Es que este polo, me ha encantado, con el sabor de las frutas rojas, endulzando con manzana o zumo de uva... y con leche de arroz, queda fantástico y con mucho, mucho sabor. 

Tan refrescante y sano para darle a los niños...y a los mayores!! Ya estáis tardando en comprar poleras de algún tipo para preparar para todas la familia.

La receta es de leches y yogures vegetales  de Hispano Europea. Un libro estupendo, con recetas tan interesantes, que no tiene desperdicio. La verdad es que este libro y los de Valerie Cupillard me están descubriendo un mundo de recetas tan interesantes..y con tantas posibilidades sanas, que me estoy empezando a animar a cocinar...supongo que influye que me encuentro mejor, porque el calor sigue apretando!!

Sencillo de preparar, solo triturar la fruta, colarla y mezclar con el resto de ingredientes. Solo nos quedará poner en unos recipientes para preparar los polos.

Ingredientes

• 50 gramos de grosellas negras y 50 gramos de grosellas (yo use una mezcla de frutas rojas  congeladas moras, frambuesas, arándanos)
• 2 manzanas o 1 vaso de zumo de manzana (yo un vaso de zumo de manzana sin azúcar, biológico)
• 1 vaso de zumo de uva (yo le puse manzana para que no fuera tan dulce)
• 1 vaso de leche de arroz

Nota- Evitar el zumo de uva en el caso de los diabéticos y mejor usar manzana natural. Yo la próxima vez, pruebo.

Elaboración

Trituramos bien las frutas rojas, con una picadora, robot de cocina, o trituradora. Colamos el zumo sobretodo si usamos frutas rojas que tienen pepitas, que son desagradables de encontrar.

Si ponemos manzana en fruta, trituramos y colamos también. Si usamos el zumo de manzana sin azúcar, no es necesario.

Mezclamos los zumos con la leche de arroz  y añadimos el zumo de uva, sólo si es vuestro gusto poner más dulce. 

Ponemos el líquido en la cubitera o polera e introducimos en el congelador. 

Cuando se empieza a formar el hielo, ponemos los bastones o palillos.

Tras unas horas en el congelador, los tenemos para disfrutar!! Están más ricos, si se toman el mimsmo día o al día después de la preparación. 

Polos de sandía

En estos días apetecen las cosas fresquitas, pero yo siempre debo buscar alternativas y recetas muy sanas que no contengan ingredientes no adecuados para mi. Pero si además el polo, sorbete o helado, lleva como único o casi único ingrediente fruta,  para preparar el helado, es aún más ideal. Además teniendo en cuenta lo que me gusta la sandía, estos polos fueron muy disfrutados.Que buena encuentro la sandía este año!!

Así que cuando veo una receta como ésta, no sólo tomo nota..sino que como son tan fáciles las preparo enseguida ( a pesar de que no me apetece nada meterme en la cocina ni casi nada!!). Cuando vi en La cocina de Ani, esta receta no tardé demasiado y contenta... si su receta fue sencilla, la mía aún más, pues ni siquiera le añadí endulzante, ya que la sandía, tenía un punto buenísimo, pero va en gusto y podéis añadir el endulzante que os vaya bien, yo usaria stevia, xilitol o concentrado de manzana. 

Ya casi no hay nadie visitando blogs, parece que todos estáis de vacaciones. Pero yo aquí voy dejando mis recetas fáciles y fresquitas, para cuando querais o para la vuelta. 

Ingredientes

•  500 g. de zumo de sandía  (se puede usar colado o sin colar) en mi caso como era sin pepitas, puse el jugo sin colar, y así mantuve la fibra ( sale unos 6 o 7 polos 6 como los que veis y 2 de forma calippo. 
• xilitol, stevia, concentrado de manzana al gusto, pero si la sandía es muy dulce, se puede evitar

Elaboración

Cortamos unos buenos pedazos de sandía, dulce y firme. Batimos la sandía en una batidora americana o robot de cocina. Si la sandía no tiene pepitas, se puede evitar colar y así usamos toda la fibra de la fruta, en los polos ni se nota.

Si la sandía o vosotros lo necesitáis, podéis utilizar algún endulzante, pero sin exagerar le quitas el sabor natural.

Rellenamos los moldes para polo, con el jugo de sandía y dejamos que congelen. A disfrutar!!